Últimamente me sorprendo preguntándome con bastante frecuencia si esto es Europa. Sí, a veces me asalta la duda y me cuesta reconocer en este, al viejo continente que antaño se identificaba como cuna de la democracia y vanguardia de otros valores. La pobre Grecia caricaturiza la situación pero ahí no termina todo, España no podía ser menos y acontecimientos económicos aparte, suma y sigue en su particular cuenta hacia atrás.
Hoy el TC (Tribunal Constitucional) de este país ha dado por "buena" definitivamente la ley que permite el matrimonio entre homosexuales, aprobada por el gobierno de Zapatero y que el PP, -como es de esperar-, ha tenido atragantada.
Si ya me parece muy fuerte que esta cuestión este todavía en debate, -a pesar de haberse aprobado una ley y al amparo de ella se casasen 22.000 parejas-, peor aún me resulta el desparpajo del PP al cambiar de casaca constantemente, por lo menos ha decidido acatar lo que el TC ha dictaminado, como si fuera opcional y celebrando que no le viene mal evitar más conflictos sociales; claro para quien olvida en cuestión de pocos meses sus promesas electorales, quitarle hierro al asunto y disimular su posición ultraderechista ante el mismo no es de extrañar.
¡¡¡Dios mío esto es Europa, esto es España!!!, como se puede intentar obviar la realidad social en un país donde mucho de los personajes más populares son abierta o ambiguamente homosexuales, incluidos altos cargos políticos, a buen entendedor...
En TVE1 he visto un debate entre una pareja homosexual y una "señora" que se empeña como parte de una plataforma u organización en dar por no válida esta ley; sus argumentos fueron de risa y los de la pareja aplastantemente lógicos, solo voy a comentar que la "señora" por supuesto esgrimió el objetivo de procrear que debe sustentar una pareja a lo que los admirables homosexuales rebatieron cuestionando si una pareja de heterosexuales, donde uno de sus miembros viera afectada su capacidad reproductiva, perdería el derecho a contraer matrimonio, argumento rotundo, aplastante, victoria por KO. Esto es solo una anécdota del día loco que en España se ha vivido.
En fin, la prudencia o tal vez la realidad aplastante se ha impuesto y todos podemos dormir tranquilos, al menos por hoy esto no dejará de ser Europa, y en específico los homosexuales podrán seguir comportándose como lo que son: seres humanos normales y corrientes, iguales a mí, a ustedes, a Gallardón y hasta quizás aún más a Mariano Rajoy.